Si pretendes montar un negocio siguiendo una línea tradicional algunos expertos se llevan las manos a la cabeza… “estás loco, todo está inventado en esa línea, debes ser original y diferente si quieres triunfar”. Si quieres montar un negocio siguiendo una línea más moderna y actual algunos expertos también se llevan las manos a la cabeza… “estás loco, eso no sabes si va a funcionar, puedes perder hasta el último céntimo. No arriesgues tanto”. Y al final ya no sabes si tirar hacia un lado o hacia otro y yo creo que lo principal es creer en ti mismo y en tu proyecto, lo demás es cuestión de trabajo, esfuerzo, economía y un poco de suerte.
Hay que reconocer que aquellos que se consideran expertos lo son porque su experiencia va mucho más allá de la media y que, por ende, deben saber más que nosotros en esto de emprender. Sin embargo, la historia de la humanidad nos ha demostrado que muchas veces los expertos se equivocan y que hace falta que venga alguien cambiando la norma para demostrar que “sí se puede”.
No voy a dármelas de “listilla” o de “sabelotodo” diciendo que yo he triunfado en cada proyecto que me he marcado porque sé lo que hay que hacer, eso es falso ¿y sabéis por qué? Pues simplemente porque no hay unas normas básicas que si sigues al pie de la letra te garanticen el éxito. Lo que hoy vale, mañana no, y las tácticas que usas hoy y que funcionan mañana no consiguen ni un céntimo de beneficio. Por eso no puedes guiarte solo por los miedos, o los “tal vez”, debes empezar por creer en ti mismo si quieres conseguir algo en este mundo.
De todo lo que he aprendido tras levantar de la nada dos negocios totalmente diferentes es que nunca está de más rodearte de buenas cabezas pensantes. Es posible que tú tengas una idea fantástica pero dos cabezas piensan más que una, y tres más que dos, por lo que contar con profesionales expertos en diferentes sectores puede hacerte la vida mucho más sencilla.
Cuenta desde el principio con:
Abogados, y más que abogados un equipo multidisciplinar de expertos en derecho que te den asesoramiento y cubran tus necesidades en este ámbito. Algunos despachos de abogados disponen de tarifas planas para empresas que, sobre todo cuando se está empezando, vienen de perlas. También es importante conocer a un buen notario si pretendes hacer sociedades. Alicia Velarde Valiente, de notariataracon.net, es una gran experta en la constitución de sociedades así que no estaría de más preguntarle todas las dudas antes de dar un solo paso adelante.
Traductores. Puede que sepas inglés a la perfección, el idioma de los negocios, o puede que no, pero no es sólo el inglés, sino que también podemos llegar a necesitar ciertos documentos en francés, alemán e incluso japonés porque parece que el imperio nipón cada vez abarca más espacio en el mundo empresarial. Por eso, sobre todo si pretender expandirte, lo mejor es contar también con los servicios de una empresa de traducción jurada. Jti es muy buena y trabajan realmente bien, os los recomiendo, porque además de tener una tarifa económica tienen la ventaja de que puedes trabajar con ellos a través de la red, sin necesidad de desplazarte, y eso es un plus.
Informáticos. ¿Qué negocio que pretenda crecer puede hacerlo sin Internet? Lo digo en serio, hoy en día o eres un comercio de barrio o montas una buena página web para darte a conocer porque, de lo contrario, fracasarás. Es más, aunque no optes por tener presencia online seguro que necesitas de ordenadores para la logística o la facturación así que ten cerca siempre los servicios de un buen informático.
Formación. Lógicamente cuando intentamos levantar un negocio damos por hecho que conocemos el mercado o el sector en el que nos vamos a mover, bien por estudios previos o bien porque nos hemos puesto a tono, pero ¿realmente tenemos la formación necesaria? En ocasiones nos falla la creatividad, en otras lo que nos falla es el plan de acción o la organización que llevamos… sea como sea, la formación es de vital importancia, tanto para nosotros como para los empleados que vengan detrás. Lo mejor es tener cerca una empresa como QB Consultores, una empresa que forma para que la persona sea el mejor profesional que pueda ser, y funciona.
Y por último, pero no por ello menos importantes, los asesores. Estoy segura de que no todos sabemos contabilidad ni tenemos la más mínima idea sobre facturación así que dejémonos de tonterías, la necesidad de contar con una asesoría o consultoría que nos lleve todo este tema es de vital importancia y el que crea que puede llevarse el “papeleo” él mismo que se prepare porque el más mínimo error puede fijar la mirada de hacienda e inspectores en ti y en tu negocio. Así que, cuidadín.