Para saber construir un negocio que vaya a tener éxito es imprescindible manejar datos demográficos y también sociológicos que den una explicación lógica y racional a la pregunta de por qué va a ser ese tipo de negocio rentable en un futuro. Este es el primer paso para construir una empresa que de verdad tenga éxito y futuro. Los peligros de no dar este primer paso son demasiados, y si no somos capaces de responder a la pregunta que hemos mencionado es casi imposible que podamos obtener resultados positivos en la actividad económica que estamos pensando desarrollar.
Los datos demográficos en España demuestran una cosa: que en este país somos muy dados a tener mascotas en casa. En efecto, muchos de vuestros familiares y conocidos es probable que tengan una e incluso varias. Tener esto en cuenta es la mejor explicación que le podemos dar al hecho de que, en España, sea idóneo abrir un negocio dedicado a las mascotas de la gente. Es por esto por lo que cada vez son más habituales estos negocios. Y es que sus responsables se han dado cuenta de la gran cantidad de mascotas que hay en el interior de nuestras fronteras.
Un artículo correspondiente a ABC informaba del bestial negocio que hay en torno a las mascotas en España. Esta noticia se hace eco de la gran cantidad de empresas que se dedican a estas mascotas y también ofrece un primer dato más que interesante, que no es otro que el de que el 40% de los hogares españoles tiene al menos una mascota. Esto permite que el público objetivo del tipo de negocios del que venimos hablando sea amplio y también bastante heterogéneo. Eso constituye ventajas para dicha entidad.
Otro artículo, en este caso publicado en el diario 20 Minutos, hacía hincapié en los datos que manejan los veterinarios. Según dichas informaciones, el número de mascotas en España es de 20 millones, una cifra brutal y que hace todavía más interesante que la entidad que pretendamos sacar adelante tenga que ver con mascotas y con animales en general. No cabe la menor duda de que las posibilidades de éxito se multiplican a medida que el número de mascotas crece y eso es precisamente lo que está ocurriendo en la sociedad a día de hoy.
Trabajar con animales puede ser bastante beneficioso en la actualidad teniendo en cuenta el amplio público que tiene una mascota y que puede necesitar de nuestros servicios en algún momento. Pero puede ser algo mucho más complejo de lo que nos podemos imaginar. Imaginemos el caso de un veterinario. Como ocurre en el caso de las personas, puede darse el caso de que, para afrontar una determinada operación, haya que trasladar a una mascota hasta otra ciudad e incluso otro país. Este tipo de casos se viene dando con bastante frecuencia en los últimos años. Así nos lo han confirmado desde Animales por Avión, una de las entidades que cubre este tipo de transportes.
Una labor que también es social
Tenemos que tener cuidado a la hora de trabajar con animales y con las familias que los poseen. Es evidente que, si disponemos de un negocio, queramos que éste sea lo más rentable posible. Pero hay que tener en cuenta la sensibilidad que tienen todas las familias con mascotas sobre los animales y compartirla. Por eso decimos que esta labor también tiene que ser social. Y es que tenemos que demostrar que el cuidado del animal tiene que estar por delante del beneficio económico.
Y si no es así, poco tenemos que ganar en este sector. Trabajar en este campo implica una cierta vocación que no debe ser olvidada bajo ningún concepto. Desde luego, son muchas las personas que viven con mascotas en España y a las que no les gustaría en absoluto comprobar cómo el veterinario de su mascota busca más el dinero que poner a salvo al animal al que tanto quieren. Desde luego, hay que mostrar humanidad para tener éxito. De lo contrario, duraremos más bien poco.
Los animales forman parte de la vida de las personas que los poseen. Para ellas, es muy importante que sus mascotas sean tratadas con el máximo respeto puesto que son seres queridos al fin y al cabo. Y el que diga lo contrario miente. Un negocio que tenga que ver con los animales es una buena idea, porque sus familias van a tratar intentar que no les falte de nada. Pero que a nadie se le ocurra tratar a las mascotas como si fueran un número. Es el peor error que puede cometer alguien que trabaje en este sector.