Entre las múltiples adquisiciones que hay que hacer para poner un bar o restaurante en funcionamiento está el frigorífico donde almacenaremos los alimentos y bebidas de nuestra carta. De hecho, es una elección bastante importante por una simple razón: este pequeño gran electrodoméstico de frío industrial es fundamental para la economía de nuestro negocio, una decisión de compra que afectará a nuestras cuentas mucho más que, por ejemplo, elegir el mobiliario, el menaje o la cubertería; puesto que este será el encargado de conservar la calidad y salubridad de nuestro producto.
Por eso, hoy vamos a darte algunas claves para elegir el frigorífico o cámara que mejor se ajuste a las necesidades y características de tu bar, restaurante o cafetería, de la mano de los expertos en maquinaría para hostelería de May Friho.
¿Por qué dedicar dinero y tiempo a elegir el mejor frigorífico industrial?
Antes de pasar a las claves para seleccionar el mejor frigorífico industrial debemos comenzar por entender porque es tan importante dedicar tiempo y presupuesto a elegir el mejor modelo de electrodoméstico de frío; y es por lo siguiente:
- Un buen frigorífico industrial es el que nos asegurará la perfecta conservación de los alimentos perecederos. Estos impiden que se estropeen antes del término de su vida útil y, así, nos permiten ahorrar en la factura mensual de carne, pescado, mariscos, fruta, verdura…
- Un buen frigorífico industrial es un electrodoméstico eficiente también te permitirá ahorrar cientos o miles de euros en su factura de electricidad.
Claves para elegir tu frigorífico industrial
- Tu espacio
Una de las claves para elegir la gama de electrodomésticos de frío que necesita tu negocio el espacio con el que cuentas. Por ejemplo, puede tratarse de una habitación especial reservada solo para ellos, un rincón de la cocina o de la despensa, el espacio que queda bajo o frente al mostrador de la barra de tu bar, una encimera, una pared…Y entonces tu elección deberá variar de acuerdo al espacio disponible.
- Durabilidad
Aunque muchas veces buscamos comprar la opción más económica, en este caso hay que asegurarnos de estar adquiriendo un producto de calidad, aunque eso implique una alta inversión de entrada.
Esa primera inversión nos garantizará que los electrodomésticos que coloquemos en nuestro bar o restaurante no solo funcionarán durante varios años sin problemas, sino que también nos permitirán ahorrar un dinero considerable en la factura de electricidad.
Otro plus extra que conseguiremos adquiriendo electrodomésticos de frío de alta gama es que están construidos con materiales de fácil limpieza y mantenimiento, lo que nos ahorrará un valioso tiempo de trabajo en el aseo de estas máquinas.
Además, piensa ¿no es preferible que adquieras uno o dos electrodomésticos de frío de buena calidad a que tengas que comprar cinco o seis de calidad doméstica?
- Funcionalidad
Otra cosa que debes tener en cuenta es que elegir un frigorífico industrial para tu bar, restaurante o cafetería no es lo mismo que elegir un frigorífico doméstico. Y es que un negocio de restauración tiene una serie de necesidades especiales que cubrir, como unas necesidades de frío que no tienen la mayoría de los hogares.
Al comprar tu frigorífico, entonces, debes tomar en cuenta la utilidad que le vamos a dar. Así, podrás elegir entre: armarios frigoríficos de conservación, enfriadores de botellas, abatidores de temperatura, congeladores, etc… dependiendo de tus necesidades. Veamos un poco sobre lo que ofrecen cada uno de ellos:
- Armarios frigoríficos de conservación. Se trata de unos electrodomésticos básicos para cualquier negocio de hostelería y están adaptados a las diferentes necesidades de una empresa y al espacio disponible.
- Enfriadores de botellas. Cualquier bar, cafetería o restaurante debe tener uno o varios enfriadores de botellas que le permitan servir los refrescos, los cavas o los vinos a la temperatura perfecta. Los precios de estos útiles electrodomésticos de frío industrial son muy económicos, ya que encuentras buenos enfriadores expositores de vinos y cavas por algo más de 250 €.
- Abatidores de temperatura. Los abatidores de temperatura son indispensables tanto para restaurantes como para bares y cafeterías que sirven menús. Se trata de unos electrodomésticos que reducen rápidamente la temperatura de los platos recién cocinados para poder guardarlos antes en las cámaras frigoríficas sin alterar su temperatura interior ni afectar el estado del resto de alimentos. Puedes conseguirlos con precios entre los 1500 y 10 000 €, por lo que debes intentar elegir un buen equipo que te garantice rápidos resultados, tenga una larga vida útil y sea fácil de limpiar.
- Congeladores. Si un congelador es imprescindible en un hogar, imagínate si es importante para un establecimiento de hostelería. Elegir un buen congelador que alargue la vida útil de las verduras, carnes, pescados y frutas congeladas te permitirá ahorrar mucho dinero ya que podrás comprar al por mayor. Además, recuerda que la calidad del congelador influye muchísimo en el sabor de los productos congelados. Puedes encontrarlo en el mercado por un precio muy asequible, en donde verás que existen modelos de calidad media desde 280 €.
Cuestiones básicas de una nevera de hostelería
Además de escoger una buena máquina de enfriamiento, también hay que saber como utilizar para preservar su buen funcionamiento y calidad. Por ejemplo, la nevera de un local de hostelería no puede convertirse en una alacena en la que se depositan alimentos sin ningún tipo de control. Por el contrario, se debe procurar un almacenamiento adecuado que facilite el trabajo y a planificación de comidas, y que evite que los alimentos se estropeen o fermenten. Algunas de las consideraciones que tenemos que tomar en cuenta son:
- Temperatura
Tener la adecuada temperatura para la conservación evita la aparición de bacterias. La temperatura media recomendada es 4 grados; puede bajarse un poco si la nevera está muy llena o elevarla si se encuentra vacía. En el caso de congeladores la media se fija en -18 grados aunque las cámaras de congelación pueden alcanzar temperaturas de hasta -35.
- Higiene
Ya que uno de los principales riesgos en hostelería es la contaminación cruzada, hay que prestar especial atención a la organización correcta de los alimentos por medio de una limpieza periódica. Para esto establece un registro con un calendario de días de lavado, productos empleados e incidencias, y no utilices objetos metálicos ni productos tóxicos o abrasivos.
- Eficiencia
Un frigorífico ordenado ayudará a prestar un mejor servicio ya que facilita el trabajo del personal, no se perderá tiempo buscando un determinado producto y, por lo tanto, mejorará la productividad.
¿Cómo organizar tu frigorífico?
Lo primero que hay que hacer es separar los alimentos tomando como referencia si son frescos, cocinados, envasados o que necesitan frío. Además, hay que hay que tener en cuenta los tiempos de conservación de cada uno de ellos para evitar que caduquen o aparezcan hongos.
Luego, a la hora de distribuir los alimentos lo ideal es disponer de cámaras independientes por cada tipo de producto, aunque es algo que solo es posible en establecimientos hosteleros muy grandes, en el caso de la mayoría de restaurantes, bares o cafeterías que cuentan con menos espacio esto es inviable y, por eso, se organizan por estanterías, de la siguiente manera:
- Frutas y verduras para consumir en crudo:recomendable colocarlas en las baldas superiores o en compartimentos independientes para no ser contaminadas por otros productos.
- Frutas y verduras que se van a cocinar: suelen ir en un cajón específico para ello en la parte inferior, y recordar que no todas necesitan frío, como en el caso de cebollas o patatas.
- Huevos: es un alimento con un alto riesgo de contaminación, especialmente si se somete a cambios bruscos de temperatura. Por eso si no disponemos de un lugar aislado, fresco y seco, lo mejor es conservarlos en la zona menos fría de la nevera.
- Carne y pescado crudos: deben ir en estanterías inferiores porque son las más frías y, por lo tanto, donde debe situarse la mercancía más perecedera. Además, se recomienda separar la carne del pescado y organizarlo por similitudes, cuidando para que no se produzcan goteos.
- Alimentos ya elaborados: estos van en la parte superior y siempre tapados para evitar contaminaciones.
- Lácteos:en la parte central o la puerta.
- Embutidos:en zona intermedia y siempre en recipientes herméticos
- Salsas:en la zona central, por encima de carnes y pescados.
- Postres: en la parte inferior siempre tapados.
Por otro lado, se debe se muy minucioso con la organización de los espacios, ya que esto reducirá los riesgos higiénico-sanitarios y contribuirá en una mejor gestión del servicio de comidas. Por ejemplo, tomando en cuenta los siguientes consejos:
- Elabora un registro:anota las entradas/cantidades/caducidad de los diferentes alimentos ayuda a gestionar y planificar los menús para saber qué podemos ofrecer cada día y qué es necesario reponer.
- Usa tapers:siempre guarda la comida ya preparada en táperes o bolsas transparentes anotando la fecha en la que se elaboró.
- Evita las aperturas innecesarias: esto porque la apertura constante de un frigorífico hace que aumente su temperatura y que puedan entrar en ella alguna bacteria flotante del ambiente.