He trabajado durante años en una empresa de diseño web. Cuando comencé, tenía habilidades básicas, pero con el tiempo, gracias a la formación que me ofreció la empresa, mejoré en SEO, diseño web y otras áreas clave que ni siquiera conocía.
Esto no solo elevó mi rendimiento, sino que también me permitió crecer profesionalmente.
La importancia de la formación en las empresas
Si una empresa quiere crecer y destacar, no puede quedarse atrás y, por ello, la formación continua empieza a ser una necesidad indispensable para cada sector. Un equipo bien preparado trabaja mejor, se adapta más rápido a los cambios y ofrece un servicio de mayor calidad.
Cuando los empleados aprenden nuevas habilidades, no solo mejoran en su trabajo, sino que también se sienten más motivados y valorados. Y eso se nota en el ambiente laboral: menos estrés, más compromiso y mejores resultados.
Además, invertir en formación es una de las mejores formas de retener talento. Cuando los trabajadores ven que la empresa apuesta por su crecimiento, se quedan. Menos rotación significa más estabilidad y un equipo más sólido.
La formación bonificada: una oportunidad para crecer sin costes adicionales
¿Qué es la formación bonificada?
Muchas empresas desconocen que pueden formar a sus empleados sin asumir costes adicionales gracias a la formación bonificada. Esto permite que los trabajadores adquieran nuevas habilidades sin que la empresa tenga que hacer un gran desembolso económico.
La formación bonificada es una iniciativa promovida por el Gobierno de España a través de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE). Todas las empresas que cotizan por formación profesional tienen derecho a un crédito anual que pueden utilizar para capacitar a sus trabajadores.
Beneficios de la formación bonificada
El quipo de profesionales especialistas en el cumplimiento normativo Dapro, que abarca áreas como la protección de datos, la prevención de riesgos laborales, el registro de jornada, la implantación de canales de denuncias y la formación bonificada nos comenta que la principal ventaja es que, “gracias a la formación bonificada gestionada por FUNDAE, puedes transformar a tu equipo en una máquina de productividad y competitividad sin impacto en tu presupuesto”.
Pero, además, existen otros beneficios que no puedes dejar pasar por alto:
- Mejora la competencia y motiva a los empleados: Un equipo capacitado trabaja con más confianza y motivación. Cuando los empleados sienten que la empresa invierte en ellos, su compromiso y satisfacción laboral aumentan.
- Aumenta la eficiencia y el rendimiento: Un trabajador bien formado comete menos errores, optimiza tiempos y contribuye a la productividad general.
- Posiciona a la empresa como líder en el mercado: Una empresa que invierte en formación se mantiene actualizada y competitiva. En un mercado cambiante, estar al día en conocimientos es clave para destacar frente a la competencia.
¿Qué es el crédito formativo y cómo calcularlo?
¿Qué es el crédito formativo?
El crédito formativo es un dinero que las empresas tienen disponible cada año para formar a sus empleados sin coste extra. Lo gestiona FUNDAE y su cantidad depende de lo que la empresa haya cotizado por formación profesional el año anterior.
En pocas palabras, si tu empresa paga la Seguridad Social, es muy probable que tenga derecho a este crédito y pueda usarlo para mejorar las habilidades de su equipo. Lo mejor es que, si no lo utilizas, lo pierdes.
Así que, ¿por qué no aprovecharlo para hacer crecer tu negocio y motivar a tus trabajadores? ¡Es una oportunidad que no puedes dejar pasar!
¿Cómo calcular el crédito disponible?
Para calcular cuánto crédito tiene tu empresa, puedes seguir estos pasos:
- Revisar las cotizaciones de tu empresa en el año anterior.
- Consultar la cantidad asignada en la plataforma de FUNDAE.
- Recordar que el crédito formativo no es acumulable de un año a otro, por lo que si no lo utilizas, lo pierdes.
Empresas que pueden beneficiarse de la formación bonificada
Todas las empresas con empleados en régimen general pueden acceder a esta formación, sin importar su tamaño o sector.
FUNDAE facilita este acceso, y permite que tanto pequeñas empresas como grandes corporaciones mejoren la cualificación de sus equipos sin afectar su presupuesto.
Algunos sectores que aprovechan esta bonificación son:
- Comercio y ventas: Formación en atención al cliente, estrategias comerciales y marketing digital.
- Hostelería y turismo: Cursos en servicio al cliente, idiomas y gestión hotelera.
- Industria y manufactura: Capacitación en seguridad laboral, optimización de procesos y mantenimiento industrial.
- Tecnología y digitalización: Formación en ciberseguridad, ofimática y desarrollo web.
- Administración y gestión: Cursos en liderazgo, recursos humanos y contabilidad.
Cómo elegir la mejor formación bonificada para tu empresa
Seleccionar los cursos adecuados es clave para que la formación tenga un impacto real en tu negocio.
Aquí te dejo algunos consejos:
- Analiza las necesidades de tu equipo: ¿Qué áreas pueden mejorarse? Habla con tus empleados para identificar qué conocimientos les faltan o qué habilidades pueden potenciar.
- Elige cursos alineados con tus objetivos: La formación debe contribuir al crecimiento de tu empresa. No sirve de nada capacitar en áreas que no tengan relación con tu actividad o que no aporten valor a tu operativa diaria.
- Opta por una metodología flexible: Existen cursos presenciales, online e híbridos. Escoge el que mejor se adapte a la rutina de tu equipo para que puedan aprender sin afectar su productividad.
- Cuenta con un servicio especializado en FUNDAE: Gestionar la formación bonificada implica trámites administrativos. Trabajar con expertos en FUNDAE garantiza que el proceso sea correcto y que realmente puedas beneficiarte del crédito formativo disponible.
Consejos para sacar el máximo provecho a la formación bonificada
Formarse es una gran oportunidad, pero no basta con inscribirse en un curso y esperar que este haga su magia. Para que realmente marque la diferencia en tu empresa, hay que saber cómo aprovecharlo al máximo. Me gustaría dejarte algunos consejos clave para que la formación no solo sea efectiva, sino que genere un impacto real en tu negocio:
- Lo primero es elegir bien el curso. No te dejes llevar solo por el título o por lo que está de moda. Pregunta a tu equipo qué conocimientos necesitan reforzar o qué áreas les gustaría mejorar. La formación tiene que estar alineada con las necesidades reales de tu empresa.
- También es importante planificar el tiempo. Muchas veces, la falta de organización hace que los empleados vean la formación como una carga extra en su día a día. Si es posible, destina horas dentro de la jornada laboral para que puedan realizar el curso sin presiones. Un equipo que aprende sin estrés asimila mucho mejor los conocimientos.
- Otra clave es aplicar lo aprendido cuanto antes. Si tus empleados reciben formación en nuevas herramientas, estrategias o procesos, dales la oportunidad de ponerlas en práctica de inmediato. Esto refuerza el aprendizaje y evita que la información se pierda en el olvido.
- Y por último, no lo veas como un esfuerzo aislado. La formación debe ser parte de la cultura de la empresa. Anima a tu equipo a compartir lo que ha aprendido, organiza sesiones de intercambio de conocimientos y haz seguimiento de los resultados.
La clave del éxito no es solo aprender, sino saber aplicar lo aprendido. Con estos consejos, tu empresa no solo aprovechará la formación bonificada, sino que realmente crecerá con ella.
Cómo acceder a la formación bonificada paso a paso
Acceder a la formación bonificada es mucho más sencillo de lo que parece. Muchas empresas ni siquiera saben que tienen este derecho y dejan pasar la oportunidad. Si quieres aprovecharlo, aquí te explico cómo hacerlo sin complicaciones.
- Lo primero es comprobar cuánto crédito formativo tiene tu empresa. Todas las empresas que cotizan por formación profesional tienen derecho a un crédito anual para formación. Este crédito depende de lo cotizado el año anterior y se puede consultar en la web de FUNDAE.
- Una vez sepas cuánto crédito tienes, es momento de elegir la formación. Puedes buscar cursos que se adapten a las necesidades de tu equipo o contactar con centros de formación especializados que gestionen la bonificación por ti. Muchas academias ya están registradas en FUNDAE y facilitan todo el proceso.
- Después, hay que comunicar a FUNDAE que vas a utilizar la bonificación. No te preocupes, no es un trámite complicado. Si trabajas con un centro de formación especializado, ellos suelen encargarse de todo.
- El siguiente paso es realizar el curso y asegurarte de que los empleados inscritos cumplen con la asistencia y los requisitos establecidos. FUNDAE exige un control de participación para garantizar que la formación se está aprovechando.
- Por último, se descuenta el coste de la formación en los seguros sociales de la empresa. Es decir, en lugar de pagar el curso directamente, la empresa lo recupera mediante reducciones en sus cotizaciones. Así, la formación puede salir completamente gratis.
Si sigues estos pasos, podrás acceder a la formación bonificada sin problemas y aprovechar al máximo un recurso que muchas empresas desaprovechan. ¡No dejes pasar la oportunidad!
Si quieres mejorar tu empresa, es hora de formar a los empleados
La formación bonificada es una herramienta poderosa para mejorar la competitividad de tu empresa. Lo sé por experiencia propia: cuando una empresa invierte en el crecimiento de su equipo, los resultados son evidentes. No solo mejora el desempeño individual, sino que también se fortalece la empresa en su conjunto.
Aprovecha el crédito formativo, capacita a tu equipo y lleva tu negocio al siguiente nivel. No dejes pasar la oportunidad de crecer sin costes adicionales. ¡Es el momento de formar y avanzar!