No es nada nuevo que la sociedad de hoy en día utiliza las tiendas online para comparar precios y cómo no podía ser de otra manera, comprar. Hemos llegado a un punto en el que nuestros hábitos de consumo nos han llevado a cambiar la forma en la que compramos, y como veremos el comercio electrónico ha cambiado la sociedad.
Ya en los años noventa comenzaron las tiendas online a vender sus servicios, si bien esto se produjo en los Estados Unidos, un país dónde los avances tecnológicos por aquel entonces estaban a años luz de España y otros países europeos. Si bien con el paso de los años esta diferencia se ha reducido, todavía existe una brecha en cuánto a tecnología se refiere. Eso sí, no podemos advertir que la neutralidad de la red ha sido destruida.
Hemos llegado a un punto en el que las empresas se han volcado en la red, ofreciendo bienes y servicios realmente diferentes. Es el caso de empresas cómo Plásticos Alhambra, una empresa familiar especializada en la fabricación de bolsas de plásticos que apuesta por la innovación tecnológica, lo que le ha llevada a disponer de la última tecnología disponible.
En el artículo de hoy vamos a ver los motivos por los cuáles el comercio electrónico se ha convertido en un elemento característica de la década. Veremos cómo las transacciones han aumentado y cómo la sociedad se ha adaptado a las compras por internet, así mismo veremos cómo los precios han fluctuado en Internet.
El cambio social de las compras
En 2016, las transacciones de productos y servicios por internet en nuestro país acumularon una facturación de 24.185 millones de euros, un 20,8% más que en 2015. Y el crecimiento se acelera: durante el segundo trimestre de 2017, la facturación se disparó, aumentando un 23,4% respecto al mismo periodo de 2016, de acuerdo con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Un tercio de la población española efectúa hoy sus compras a través de internet, lo que significa que el comercio electrónico en nuestro país se ha triplicado en los últimos 10 años, según se desprende del informe Nuevos hábitos de consumo, cambios sociales y tecnológicos del Consejo Económico y Social (CES).
Y aunque España es el cuarto país europeo en ventas online, es uno de los de mayor potencial dentro de la UE, según el CES, pues solo el 16% de las transacciones se realizan con pagos electrónicos, frente al 75% en el caso de los británicos, el 64% de los alemanes o el 49% de los franceses.
En este sentido, el informe del CES destaca que cerca de una quinta parte de la población adulta española no usa aún internet y que una tercera parte de los que lo hacen no poseen habilidades digitales o sus conocimientos son muy bajos.
Siguiendo con ese informe, entre 2006 y 2015 todas las partidas del gasto en los hogares se redujeron como consecuencia de la crisis económica, a excepción del gasto en salud, que creció un 3,4% durante ese periodo, y en comunicaciones, que aumentó cerca de un 26% en todos los niveles de renta.
Una tendencia que confirma el Estudio sobre Comercio Electrónico B2C (Business to Consumer) 2016 del Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI), que arroja que en 2016 cada español aumentó su presupuesto destinado a las compras virtuales un 18%, con un gasto medio per cápita de 1.198 euros.
Entre los principales atractivos que llevaron a los internautas españoles a recurrir al eCommerce en 2016, según el estudio del ONTSI, figuraron los precios, las promociones y las ofertas (que sedujeron a un 75,3% de ellos) y la comodidad (que conquistó al 68,6%). Por contra, los que no se aventuraron en el mundo de las adquisiciones online alegaron como principal freno la imposibilidad de ver el objeto de su deseo en vivo y en directo.
Según el informe Evolución y Perspectivas eCommerce 2017 del Observatorio eCommerce y EY, cerca del 90% de los negocios online estimó que sus resultados aumentarían en 2017 y dos de cada tres creyó que lo harían más del 10%. El 63% de las más de 20.000 tiendas online consultadas consideró que el crecimiento de sus ventas en 2017 sería superior al 10%, el 25% opinó que podrían aumentar hasta el 10% y solo un 1% contempló caídas en los resultados.
El sector del comercio electrónico goza cada vez de mejor salud porque tiene la capacidad de obtener nuevos consumidores cada año. En el caso concreto de España, no solo porque aún cerca de una quinta parte de la población adulta no usa internet, sino, básicamente, por las nuevas generaciones de nativos digitales y millennials, que han nacido en medio del proceso digital, han adoptado internet como herramienta principal de uso. El eCommerce que ha revolucionado nuestra forma de consumir ha venido para quedarse.