Una de las cuestiones por las que destaca un país como el nuestro es por la gran cantidad de superficie de cultivo de la que dispone, además de por la calidad que va asociada a este tipo de cultivo. Tenemos mucha suerte en este sentido y no siempre la valoramos como es debido. Y es que es fruto de cultivos como de los que disponemos por lo que podemos producir el mejor vino, tomates o patatas de primera calidad y un sinfín de productos que llenan las neveras y despensas de miles de familias a lo largo y ancho de todo nuestro país.
España ha sido un país con grandes cultivos desde hace siglos. Raro sería que existiera una nación en la que tuvieran más experiencia que nosotros en este sentido. Nuestro clima es uno de los grandes valedores de las calidades de nuestros cultivos y de todos y cada uno de los productos que se derivan de ellos. Gracias a esas calidades, podemos decir que España es una referencia mundial en materia gastronómica. Los expertos en lo que respecta a esta actividad así se han encargado de corroborarlo una y otra vez con el paso de los años.
Un estudio publicado por la plantilla de trabajadores y trabajadoras de Statista ponía de manifiesto una gráfica en la que se hacía un recuento del número de hectáreas de cultivo que tiene nuestro país dividido por comunidades autónomas. Andalucía, con más de 3’6 millones de hectáreas, es la región de nuestro país que lleva la voz cantante en este sentido, muy seguida por Castilla – La Mancha y Castilla y León, que superan en ambos casos los 3’4 millones de hectáreas. Lo que está claro, atendiendo a los números que os estamos proporcionando en este párrafo, es que España es un país de claro carácter agrícola.
Otra noticia, en este caso publicada en la página web de Efe Agro, indicaba que la superficie total de cultivo en España sobre la superficie total del país era de un tercio. Uno de cada tres metros cuadrados de España está dedicado al cultivo, en otras palabras. En cuanto a la división por regiones, en 2016 (momento en el que se publicó la información a la que estamos haciendo referencia) Era Castilla – La Mancha la comunidad con más metros cuadrados dedicados al cultivo, llegando a situarse en torno a las 3’7 millones de hectáreas en este sentido.
España siempre ha sido un país con una gran tradición de cultivo y así lo va a seguir siendo en los próximos años. Son muchas las personas y empresas que siguen interesadas en apostar por los cultivos porque saben de sobra que buena parte de los productos de referencia de la gastronomía de nuestro país proceden de ahí. Es lo que nos han indicado los profesionales de Marenostrum Tech, fabricantes de extractos de plantas. Según sus datos, la demanda de extractos botánicos para la creación de nuevos cultivos ha crecido en los últimos años y las previsiones apuntan a que van a seguir haciéndolo en el futuro inmediato.
Un valor indisociable de nuestro país
Una de las cosas por las que España es más reconocida a nivel internacional es por la calidad de los productos que aquí se elaboran. Obviamente, eso hace referencia también a productos que no tienen nada que ver con el cultivo, como lo puede ser en el caso relativo a los jamones o el marisco. Pero está claro que, sin nuestros cultivos, entenderíamos que la gastronomía de nuestro país no tendría la misma potencia y la misma imagen de la que goza en estos precisos instantes.
Las autoridades públicas deben servir de ayuda a todas esas empresas y pequeños agricultores que sigan queriendo apostar por el aumento de las superficies de cultivo en nuestro país. Esto tiene múltiples beneficios: y es que nuestra economía, la imagen de nuestro país en el plano internacional y el respeto por el medio ambiente crecerán tanto como decidamos aumentar nuestras superficies de cultivo. Es algo que deberíamos tener en cuenta y que debería declinar la balanza en favor de una apuesta más grande por la agricultura que tantas buenas noticias nos ha reportado a lo largo de nuestra historia.
Ni que decir tiene que, en una época de esa historia en la que se está valorando cada vez más la producción de pequeños agricultores y la apuesta por productos ecológicos y de Indicación Geográfica Protegida, aumentar la superficie de cultivo es una acción que solo nos va a ayudar a aumentar la demanda de productos típicos de nuestros campos. Y esto, como ya podréis suponer, será idóneo para nuestra economía, para las empresas del sector alimentario y para mejorar la alimentación de todas y cada una de las personas que apostemos por estos productos. Y eso es de la máxima importancia a día de hoy.